miércoles, 10 de agosto de 2011

Olor a rosas y talco


Mi santa madre tenía debilidad por las flores, y sus clientes favoritos, conociendo esta debilidad, creo que se aprovechaban de ella.  El señor Obiols, por ejemplo –él llegaba los jueves-, siempre aparecía con un perfumado ramo de rosas rojas.  A mí nunca me llevaba nada, pero a mi madre sí, las rosas rojas.  Entraban al pequeño taller y allí permanecían una hora exacta. 
Mi madre era modista, y aunque casi nunca me dejaba entrar a su taller, a veces me escabullía y me encantaba ver la reluciente máquina de coser y percibir su delicioso olor a aceite –nuevita, como si nunca la usara-, la mesita donde ponía el jarrón con flores y una cama en la que –según me dijo− acostaba a los clientes para tomarles las medidas.
Recuerdo que una vez, olvidando que mi madre tenía un cliente, entré distraídamente y un señor estaba desnudo y mi madre quitándose la ropa, luego me explicó que había clientes que sentían tal vergüenza que ella tenía que ponerse en la misma situación –quitarse la ropa− sin lo cual era imposible tomar sus medidas. 
Pero volviendo al señor Obiols.  Era un señor gordito, de pequeño bigote, baja estatura y algo calvo; decía: Sus rosas, madame.  Mi madre sonreía agradablemente y era al único al que preguntaba si deseaba tomar algo antes de pasar a tomarle las medidas.  Un brandy me vendrá bien, madame.  Era todo un espectáculo que yo disfrutaba mucho por la caballerosidad y el olor a talco del señor Obiols. 
Una vez que mi madre fue por el brandy del señor Obiols, éste me dijo: Acércate.  Me acerqué curioso porque nunca me había hablado, es más ni me miraba.  Eres un niño estúpido.  Yo reí a carcajada limpia porque me pareció muy gracioso cómo lo dijo.  Sí que lo eres, muy, muy estúpido.  Mi santa madre que entraba y escuchó aquello también rió contagiada con mi alegría, luego se sentó a la par del señor Obiols, cruzó sus hermosas piernas y le contó:  Lo heredó del padre, pero creo que Andresito será más estúpido que él.  Y reí a más no poder.  Finalmente también el señor Obiols sonrió viendo el escote de mi madre, aunque al mirarme se ponía serio.  Luego desaparecían en el taller y yo comenzaba a contar el tiempo.  De hecho, fue por el señor Obiols que aprendí a conocer el reloj.  Una hora exacta.  Salía mi madre primero y luego el señor Obiols −ya sin olor a talco− a quien acompañaba hasta la puerta.  Ella extendía su mano, él la besaba muy caballerosamente y decía: Hasta la próxima, madame.  Y se iba.  Mi madre quedaba radiante con sus flores y pasaba el día más amable que de costumbre.

57 comentarios:

  1. Y no desaparecí... ¿cómo desaparecer de un sitio que ofrece este tipo de joyas?,
    Julio, que narración limpia, concreta, hospitalaria; uno diría que no sobra ni falta nada, exquisito.

    le dejo un abrazo, conmovido-agradecido-sublimado.

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  2. Estoy segura, que lo que menos usaba esta mujer era el dedal. Eso sí muy organizada, cada día uno, los jueves el señor estùpido del bigote, que debía de ser el mejor cliente, porque reirle la madre el insulto que le dirige al hijo, eso no es una madre, es cualquier cosa. Y Andresito de quién es? Porque me da que todavía no ha venido al mundo.

    Su santa madre del niño sabe muy bien lo que se hace.

    Relatado con la inocencia de un niño y me da que un pelín irónico...

    Un beso Julio!

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  3. Hola Julio!! Cómo no se le iba a ir el olor a talco. Una madre demasiado complaciente con el señor gordito, lo digo por reirse del insulto a su hijo. Y Andresito? Una vida programada pero que la hacía feliz, por lo menos en esos días de la visita especial.
    Me gustó mucho, tiene variantes que hacen pensar, eso lo provoca un buen escritor como tú.
    besosssssssss

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  4. Un relato estupendo, sin desperdicios. Me quedo pensando...¡qué manera tan especial de tomar las medidas . jajaja.¿Y lo del niño? Bien, gracias. Excelente , como siempre. Un abrazo.

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  5. Que maravilla de relato. Y sí. ¡Que manera de tomar medidas! me hiciste reir a "carcajada limpia". -Como siempre hermoso juego de palabras-
    Con mi admiración
    Un abrazo

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  6. Vaya, el señor no tenía muy desarollado el amor de padre que digamos.

    Besos

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  7. Si vas a una playa nudista, no pretenderás ir en bañador, no? pues ésto es lo mismo, si el señor está desnudo, la costurera también. Lo que ocurra después es por culpa del calor.

    Excelente, Julio.

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  8. La ingenuidad hecha ternura en un relato que podría ser triste sin embargo se encuentra la forma amable en la degradación, aunque no tengo muy claro si la mamá de Andresito era o no felíz con su trabajo.
    Besos Julio.

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  9. Me da pena Andresito. La ignorancia puede ser dulce pero la realidad es tan ácida que hasta me duele. Ya sé que es ficción pero me has dejado el corazón arrugado porque estoy segura de que existen madres así, y señores gorditos y calvos que se ríen de las deficiencias de los demás, aunque sean infantiles.
    Un beso y felicidades por lo que logras transmitir con tus palabras. Haces arte.

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  10. Aplausos, salteño...más aplausos...
    El auditorio está de pie, te mando flor de abrazo

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  11. Julio:disfruté de este excelente relato.
    Pero especialmente observo cómo con tres detalles describes la época en que transcurre.

    Un abrazo:
    Elsa.

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  12. Hola Julio, ingenioso como siempre, un poco dura la madre, para mi que no cogía el dedal, una forma de tomar medidas muy peculiar.
    Bravo escritor.
    Saludos.

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  13. Pobre e inocente niño... vivía en un completo engaño, pero tal vez hubieran sido muchos los que lo hubieran creído hace años en los que la televisión no corrompía de tal manera. Pero el comportamiento no es el propio de una madre. No está nada bien que le ría el insulto, pues por mucho que se lleve mal con el padre del niño o el cliente sea tan bueno, nunca dejará de ser su hijo y debe transmitirle cariño. Andresito parece un pequeño que está por nacer... esperemos que lo trate mejor. Buen escrito, Julio, como siempre :) Además de ingenioso. Un abrazo =)

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  14. Hola Julio, no me extraña que la máquina de coser estuviera nueva, reluciente y sin usar. En este curso de corte y confección la modista no sabe que hay que tomar medidas desde el escote hasta la sisa sin inclinarse.
    Me has hecho reír y has estado genial. Un abrazo.

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  15. Julio...otro excelente relato, impecable... el descaro cablgando sobre la inocencia de un niño...parece mentira, pero en el mundo hay muchas costureras y maniáticos gorditos que tuercen la vida de los niños y las marcan para siempre...Un gusto leerte, recibe un fuerte abrazo.

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  16. ¡Al fin puedo comentar! Lo cual no significa que no te leyese.
    Otro magnífico texto con la travesura pero el saber hacer de un niño grande travieso...muy travieso...:)
    Un abrazo, señor Julio.

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  17. Excelente relato Julio que narras con tu maestría y tu sabiduría. Me ha gustado desde el principio hasta el final.
    Te felicito, amigo.
    Abrazos. Rosa.

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  18. Julio, que gusto da leerte, es tan perfecto cómo articulas el relato, como lo vas perfilando, y como dijo Juan por ahí más arriba, parece no sobrarle nada ni faltarle nada.

    Exquisito.

    Abrazo!

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  19. Julio, me encantó el relato. Rescato la inocencia de este niño, su tierna mirada ante los hechos, sus pareceres, hasta le sirvió de aprendizaje -el de la hora-. Me alegro por él que nunca haya dejado de ver y creer en "su santa madre", pues para él lo era; en definitiva, es lo que importa. ¿Juzgar una situación? No, vaya uno a saber los por qué y los cómo. Lo importante es la integridad mental de este niño que no ha perdido el respeto hacia ella mientras olía rosas y talcos... ¡Entrañable historia, Sr. Escritor! Bravoooooooooooooo, mi querido amigo!!!

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  20. Estimado Don Julio, que delicadeza con la que construye sus relatos, desde principio a fin lo he disfrutado, deslizandome entre la creatividad y la imaginación.

    Con mucho aprecio,

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  21. Que hermosa manera de narrar, como un juego, tan sencillo y a la vez tan complejo, hilas con las palabras justas esta historia de talco y rosas...
    Gracias.

    Besos desde el aire

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  22. Belo texto para se ler e meditar e ainda acreditar. Sua mãe foi uma santa mãe!

    Maria Luísa

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  23. Uf Julio aun estoy pensando como puede ser el oficio de modista tan complicado....él se desnuda ...ella también el niño sale ...se quedan solos tomando medidas...uf que calor sobra las rosas...el pobre niño ...el estupido el señor ,el niño un cielo...me ha hecho sonreir el señor Obiols que este apellido es Catalan.
    ha sido un bonito y picaro relato.
    un abrazo
    MARINA.
    ***ESPIGAS DEL ALMA III***

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  24. El señor Obiols es un cafre.

    Saludos.

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  25. Requintadamente bem escrito. É um prazer poder ler-te.

    Um forte abraço Julio.
    oa.s

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  26. Maestro...genial!!!el señor obiols un impresentable, la madre una imbecil y el hijo...el pobre!!!Dios le da pan a quien no tiene dientes!!!!esa mujer nunca debió de tener hijos.Me sale la vena maternal y....la cagamos como me salga jajajjajajaj.Toreroooo toreroooo,aplausos y el rabo y las dos orejas!!!jajjajajaj Hoy te lo mereces!!!!!!!!:):):)

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  27. Es mejor ser estúpido en muchas ocasiones, y no ver la realidad, vives en tu mundo sin que este te hiera. Ya hay personas que intenta hacerlo constantemente. Una lástima.

    Genial relato, me he embobado con él.

    Besitos y sonrisas menos estúpidas:))

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  28. Cuanto tiempo sin leerte Julio. De nuevo un relato magnífico.
    Un saludo!

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  29. Me sacaste mi Kayla más tierna y se desbordó una lágrima por mi mejilla Qué bello realto de contraste entre la realidad dura y la inocencia.
    Un abrazo grandote.

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  30. Quise decir "relato". Mi Kayka-impaciente le dio a la tecla de "enter" demasiado rápido.
    Un abrazo.

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  31. Julio, ese momento de la concatenación de risas que asiste a los personajes has sido un golpe brutal, un impacto amargo que ha transformado todo el relato en un llanto de decadencia humana. Emotivo y rechinante, como pasar los dedos fuertemente por la superficie rosada e interna de una caracola.
    Es una historia contada con esa finura, provoca esa delicadeza que acaricia y hiere al mismo tiempo y que, desde mi humilde opinión, pienso que eres un maestro para plasmarla.

    Mil gracias por todo, Julio...


    Un abrazo indomable.

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  32. Vaya relato Julio!!!! narrado desde la inocencia de un niño, pero yo creo que esta inocencia es supuesta, el niño sabía perfectamente a qué se dedicaba su madre, pero como una madre es lo más grande, él la respetaba, aún con su trabajo, el más antiguo del mundo. Los niños se dan cuenta de las cosas perfectamente, más de lo que creemos, por eso cuando el gordo y calvo le dice que es un estupido, el niño se rie....y la madre se rie también, no le rie la gracia al sr. Obiols, es una risa cómplice con su hijo,los dos sabian perfectamente de que se reían y era de él, del gordo calvo, es más la frase que dice la madre es significativa cunado dice "lo heredó del padre"...
    En definitiva Julio, que si no me enrollo, me ha encantado el relato, es fantástico!!!! tiene su miga. Mucha miga!!!

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  33. Como siempre, usted tenía razón. Un título puede afectar mucho nuestra percepción de la historia.
    Gran trabajo.
    Saludos.

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  34. Muy bueno, como todo lo que compartes. Eres extraordinario. APLAUSOS. Saludos cordiales.

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  35. Un relato perfecto, sin nada que sobre ni falte...con un toque de ironía, como me gusta...esa pizca de sal y pimienta.
    Yo creo que practicaba de todo menos tomar medidas y me da que ese Andresito tenía las semillas del señor del bigote, o me estoy confundiendo?
    Ayyy!!! Cómo te gusta mantenernos en vilo!!!, jajaj me encanta Sr Escritor y Poeta

    Un beso

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  36. Hola Julio!!
    Cuentas la historia de una forma tan natural,que parece que la estoy viviendo.
    Eres increible,la máquina de coser como si nunca la hubiera usado,jaja,muy bueno Julio!!

    Las historias sencillas dan mucho juego,verdad??,no hace falta que tengan muchos artilugios para ser una historia magnífica.
    Te felicito,de verdad!!

    Un abrazo

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  37. Por analizar algunos de los muchos detalles que nos dejas en este relato, debe confesarte que me gusta y mucho, podría señalar: el hecho de que escribas en primera persona y el texto trate sobre la madre del protagonista es ya algo único y casi exclusivo de buenos escritores jaja. Después acrecenta la buena sensación, el lujo de detalles del taller de la costurera, la crueldad del señor Obiols y la insensibilidad de la madre al reir y confirmar las palabras de su cliente, además del primer empleo subrepticio de su madre...

    un gran relato, no cabe duda.
    enhorabuena

    un abrazo

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  38. Excelente relato.
    Mucha gente confunde la inocencia con la estupidez.
    Saludos.

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  39. Magnífico y tragicómico relato, primero me reí mucho, pero al terminar de leerlo me quedó un gusto amargo por el pobre Andresito, aunque bien pensado...Bendita ignorancia.
    Genial tanto en la forma como en el fondo.

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  40. Has conseguido confundir realmente al drama en este relato. Se camufla entre la ingenuidad del niño y la sensualidad de la narración. Sin embargo, igual que desaparece el olor a talco y rosas, desaparece también la ternura cuando acaban las palabras.

    Un gusto leerte.

    Un fuerte abrazo.

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  41. Has conseguido maquillar el drama en este relato, se camufla bien entre la ingenuidad y el olor de talco y rosas. Pero, cuando acaba el olor, acaba también la ternura y aparece el futuro, el día que el niño despierte.

    Un gusto leerte.

    Un abrazo.

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  42. Julio, nos regalas unos maravillosos relatos, es un placer dejarse llevar por tus letras, nos adentras en ellas.

    Gracias por deleitarnos con tus relatos.

    Besos.

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  43. Juan Ojeda: Gracias mi querido amigo, recibo entusiasta y en confianza tu abrazo, conmovido-agradecido-sublimado. ¡Otro abrazo!

    ion-laos: Gracias, Ion-Laos, por tu coraje y apetencia de decirle un par de cosas a la madre de Andresito quien, a propósito, ya está en ese plano, existe en la vida de los personajes. Como dijo la poeta Merche Martin ¡eres tremenda! Un gran abrazo.

    Gabriela Maiorano: Gracias mi querida escritora, por tu tiempo, lectura y comentario. Cuando tengas un tiempo te invito a www.juliodiaz-escamilla.blogspot.com Un abrazo.

    Alma Mateos Taborda: ¡Y además le gustaban las rosas! Creo que esta señora pensaba que "el cliente siempre tiene la razón! Gracias por todo poeta. Un abrazo.

    Rosa.E: Gracias mil, mi querida Rosa. Nos hemos topado con una modista muy especial. Y ciertamente uno no sabe qué se cocina en el interior de los hogares. En fin. Un abrazo.

    María: El señor Obiols, por lo que vi, sólo iba a lo suyo; lo que nunca entendí es por qué le molestaba Andresito. Un abrazo y gracias.

    Jessenia: Una forma de ver las cosas muy complaciente y con mucho humor, te felicito por ello. Mil gracias, poeta. Un abrazo.

    Rosi: Y no sé si era feliz, amiga mía, pero que lo disfrutaba lo disfrutaba. Mil gracias por tu visita, tu tiempo -valioso- y tus argumentaciones. Un abrazo grande.

    merche marín: Gracias, querida poeta. A veces los relatos y cuentos no son idóneos para seres tan sensibles como tú -me disculpo por ello-. Es el mundo literario, no lo olvides. Mil abrazos.

    Omar(enletrasarte): Mi querido poeta, te aclaro, no porque me ofenda, es que algún salteño pudiera hacerlo. Vine a tu país en Dic. 2005 y en Salta me finqué en Feb.2009 Y si patria es donde se sueña, vive, canta, come, sufre, llora, escribe, camina, duerme y despierta ¡soy salteño! Un abrazo y mil gracias por tanto.

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  44. Elsa Tenca-Mariani: Siempre te esperamos en Hablapalabra con entusiasmo y mucho cariño, sobre todo porque tu ojo avisor descubrirá un microcosmos y algún fenómeno en lo escrito. Gracias por tus aportes. Un abrazo.

    Magda: Así es, amiga mía, no cogía el dedal, ni las tijeras ni la máquina de coser, pero sí cogía las rosas y el tiempo -una hora exacta- de sus clientes. Un abrazo.

    Natalia Ortiz: También me ha molestado la licencia que a Obiols dispensa la madre. Y te lo digo, Andresito está en el plano ficcional de los personajes. Gracias mil, amiga mía.

    Loli Salvador: Celebro que estés de vuelta, amiga mía, de tu fascinante viaje a Estambul. Ojalá nos proveas otras entradas con más fotografías. Un abrazo.

    Cinarizina: Gracias mil, Cinarizina, por tu sensibilidad, y sobre todo tu siempre grata presencia en Hablapalabra. Realmente nos sentimos muy orgullosos de tenerte entre nosotros. Un abrazo.

    Eduardo: Es una enorme suerte y alegría tenerte de vuelta, y que google te deje comentar, ciertamente que nos has hecho falta. Un abrazo, señor Eduardo.

    Rosa Mª: Las gracias te las doy a ti, querida amiga, por tu tiempo, tu lectura, tus comentarios y que te guste lo que del oficio de este autor llega al plano material. Un abrazo.

    El Escritor: Es honroso que nos proveas ese levantón de ánimo desde tu perspectiva y terrenos. Mil gracias por estar. Un abrazo.

    Diana Profilio: A mí me ha encantado tu comentario, escritora amiga, porque no desencaja en la fábula misma, que el niño siga siendo niño. Que hasta en la literatura hay adultos malosos, pues bueno, es el juego ficcional.
    Un abrazo y mil gracias por tu comentario tan valioso.

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  45. esta historia me lleva a algun pueblo de provincia, el despertar del niño al mundo de los adultos, la crueldad de ellos, el desamor, solo la presencia de la falsa cortesía tapando la imagen de pecado
    es un escrito que pinta bellamente las costumbres de ciertos lugares
    saludos querido amigo, me encantan tus historias

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  46. CAMPO LITERARIO: Celebro, poeta amigo, que el relato haya resultado de su entera satisfacción. Un abrazo grande.

    Rosa: Siento, querida amiga, que todo es cuestión de observar e ir organizando escrituralmente aquello que se observa en la mente. Un gran abrazo y gracias.

    Maria Luisa Adães: Gracias, poeta, la narración es llevada al extremo máximo para que Andresito siga sosteniendo que su madre es una santa. Un abrazo y gracias por pasar.

    Marina-Emer: Creo que o podemos evaluar ni condenar a los personajes desde nuestras tablas éticas, allá adentro de la historia se manejan otras. Qué es correcto o incorrecto, escapa del universo deontológico del autor. Gracias poeta, por tu comentario. Un abrazo.

    TORO SALVAJE: Aprecio tu tiempo en la lectura, Xavi, que tu fin de semana sea espléndido. Un abrazo.

    OceanoAzul.Sonhos: Exquisito comentario el que nos dejas, poeta. Un abrazo grande.

    midala: Primera vez que atestigüo que los personajes te sacan de las casillas ¡me alegra mucho! Toda vez recuperes la alegría ¡ah, ya vi mi: Torero torero! Y encima: el rabo y las dos orejas. Hoy salí ganando más. Gracias, Midala querida, por tanto. Un abrazo.

    Simplementeyo: De alguna manera también quedé embobado por esta forma de vida de la madre de Andresito (sin caer en fanatismos moralistas); pero veo que el niño es feliz, a su manera, pero lo es. Gracias por "embobarte". Un gran abrazo entusiasta y lúcido.

    Luis Fernandez Duque: Gracias, poeta, y celebro (otra vez) que estés de vuelta. Hey, pásate por favor a www.juliodiaz-escamilla.blogspot.com -A viva voz-.

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  47. Kayla: Ya conocí, entonces, a otras dos Kaylas, la tierna y la impaciente. Mil gracias por vivir y afectarte por la historia. Un gran abrazo.

    Gabriela Amorós: No tengo empacho -nunca lo he tenido- en compartir mis procesos escriturales, ni mis experiencias y te digo que cuando el personaje (Obiols) le dice al niño que es un estúpido y éste suelta una carcajada, entendí una virtuosa ingenuidad e inocencia -propia de un niño que ama a su madre-. Mil gracias por esa presencia indomable que significa para Hablapalabra y todos nosotros tu brillante pluma. Un gran abrazo.

    METAMORFOSIS: Nada hay más importante para un escritor que presenciar directamente las reacciones "emocionales" y "racionales" que su texto provoca. Tus aportaciones siempre son brillantes y das otras dimensiones fabulares a lo contado. Gracias mil por ello.

    Emanuel Carrizo: Gracias, mi querido don Emanuel, por recordar nuestras charlas; es honroso que usted grabe en alguna parte de "su oficio" aquellos decires de su servidor. Un gran, gran abrazo, amigo mío.

    S.A.D.E.FILIAL VILLA MARIA: Amigos míos, ustedes son extraordinarios por expandir la escritura literaria en su ciudad y salir de ella a apoyar a otros autores, como éste, servidor vuestro. Un gran abrazo.

    Princesa115: Entre la atmósfera de inocencia, candorosidad y ternura se mezcla la mordacidad y la ironía, y tal cual lo dijo la poeta Gabriela Amorós señala esta decadencia que nos acontece. Mil gracias por estar aquí, poeta, mil gracias. Un abrazo.

    David C.: Gracias, amigo mío, pero lo mejor -para ti- está en www.juliodiaz-escamilla.blogspot.com (A viva voz). Un gran abrazo.

    estrella: Nos sientan bien las historias simples, sencillas y llanas, sin retorcer los decires y haceres de los personajes. A propósito JOTA ya comenzó otra serie Te dios(No.) Lo estamos leyendo. Un abrazo.

    Esilleviana: En el camino -el largo camino como escritor- he visto a otros huir espantados cuando un protagonista en primera persona no es un héroe que se asemeje a ellos. Por ello también Esmalte Rojo está en primera persona y la protagonista es una chica. Que la madre de Andresito sea "lo que es" no significará que la mía lo es o lo fue. Esto, ocioso es decirlo, es literatura, y tu servidor ejerce el oficio de escritor. Sea, tenemos que darle entera libertad a nuestros personajes y no sólo una libertad condicional. Un gran abrazo, y gracias mil por tus valiosos ¡siempre tan atinados! comentarios.
    Un abrazo.

    Balamgo: Quiero oficial, sobria, entusiasta y con griterío incluido darte la más cordial bienvenida a esta tu casa, y como digo siempre, aquí te sentirás muy bien acompañado entre estos grandes escritores y escritoras que me acompañan. Estás entre amigos, en tu casa. Un abrazo.

    clochard: Gracias mi escritor amigo, por no "leer" sino vivir lo leído, esa información que percepta la mente y recrear en alguna parte del cerebro lo que el autor intentó plasmar. Un abrazo grande.

    Aníbal Jaisért: Me quito el sombrero por tu análisis y visión, escritor amigo, ¡cómo has podido penetrar lo que creí sellado en el puro divertimento! Te felicito. Venga el fuerte abrazo.

    Carla: La escritura literaria tiene varios frentes de dificultad, dicha y tragedia. A mí, con ese otro fenómeno que significa la lectura, me va de maravillas, porque tengo lectores-escritores de enorme valía, y generalmente completan las deficiencias de este autor. Mil gracias por tanto. Un abrazo.

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  48. La abuela frescotona: Me encanta que quien lee aporte y enriquezca el texto propuesto por el autor, y sí, bien pudiera ocurrir en algún pueblo de provincia. Enorme satisfacción le significa a Hablapalabra que pases por aquí y disfrutes lo que intencionalmente está escrito para eso, para recrearnos, literariamente hablando. Un gran abrazo.

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  49. la admiro. eso de la "santidad" es un arte totalmente insoportable. aún así ella consiguió serlo al menos para alguien.

    y admiro a andresito. hay que ser inteligente para ser tan estúpido de equivocarse en cosas que el común de la gente no se da idea para errar.

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  50. divertidísimo, Julio, un relato breve pleno de ironía que me ha provocado una hilaridad semejante a la de Andresito. Un placer haberlo leído.

    Saludos.

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  51. Clo: Celebro que hayas venido, escritora amiga, realmente es importante para todos nosotros tu presencia. Mil gracias por la lectura. Aquí estás entre buenos y buenas amigas, estupendos escritores(as) y fantásticas personas todos ellos. Un abrazo.

    Mayte_DALIANEGRA: De alguna manera también yo he disfrutado trasladando a la escritura aquella fábula que advino a mi parte consciente. ¡Bienvenida a Hablapalabra! Un abrazo.

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  52. Te disfrutamos, te aprendemos, nos perdemos en tus historias, las vivimos, las sentimos, nos imaginamos protagonistas... lloramos, reímos, eres un mundo de emociones compartidas mi querido amigo Julio. Que rico es leerte. Gracias por compartir tu maravilloso talento. Saludos desde Nicaragua.

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  53. Personalmente creo que esta mujer hacia una gran obra de costura... recosia, bordaba y zurcia corazones...
    Me gustan estas tramas donde hay dos historias paralelas, la real y la visión inocente que nos presenta el niño.

    Eres un mago de la narrativa, lo sabias verdad? creo que ya te lo habia dicho... pero lo eres.

    Besos Julio.

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  54. Buen relato, me dio pena por Andresito, es realmente tan ingenuo?

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  55. Excelente relato desde la ingenua perspectiva de un niño. En Efecto, hay talleres de costura que tienen mucha enjundia.

    Gracias Julio por tu visita a mi casa en la que te doy la bienvenida y sigo leyendo tus relatos.

    Afectuosos saludos.

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  56. Un relato sensacional, Julio. Es tan agridulce que se siente la ambigüedad del niño y de la madre. Todo el cuento está escrito de manera sobrio. Realmente está todo en su sitio. Las descripciones, los diálogos, los detalles.

    Creo que lo has bordado, nunca mejor dicho.

    Un abrazo
    y
    mi enhorabuena
    Ana

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