lunes, 22 de agosto de 2011

Dormir o no dormir


Cuentan que, una noche de verano, el señor Rovira se negaba a dormir; pese a que sus párpados le caían sobre las húmedas esferas oculares −ojos, las llaman−, él se negaba rotundamente a ir a la cama.  Su pesado cuerpo, tibio y lejano, había dejado de pertenecerle y sólo su consciencia estaba en la realidad, todo lo demás ya había traspasado ese otro mundillo que han dado por llamar onírico.
Pero él seguía en la vigilia, o digo, su mente, porque su cuerpo, como antes  quedó afirmado, ya no le concernía y, sentado en el sofá del living se negaba a ir a la cama.  Sólo requería un gamo de voluntad, levantarse y caer en el mullido colchón ¡pero no!  El sueño no iba a vencerlo.
A lo lejos le llegaba una voz, pastosa, muy lenta, y por la ranura de sus ojos −que eso quedaba ya de ellos, una pequeña ranura− veía a su mujer, Inmaculada, hablándole algo.  La veía en cámara lenta, alejarse y acercarse, llevándose las manos −len t amen te− a la cabeza y diciéndole algo, entonces se producía una ligera conexión entre su cuerpo y su mente y movía una mano. 
−Dé ja te de ton te rías −decía la mujer metida en un transparente camisón.
El señor Rovira movía pendularmente su dedo índice.
−Me vas a vol ver lo ca −y la veía irse lentamente.
Entonces se producía el descalabro ¡pensamientos invadiendo su consciencia!  Su propósito, o despropósito, era llegar a blanquear su mente, ese estado que −según le había dicho su compadre− era el ideal de un ser iluminado.  “Dormir es ensayar la muerte”, le dijo su mente, él movió la cabeza asintiendo ¡y lo lamentó! Era un absurdo hablar con su parte consciente porque en él −también lo había dicho el compadre− se colaba el Ego, un demonio que quería llevárselo a la tumba, y todo comenzaba con quedarse dormido que es “un ensayo a ser cadáver”, pensó.
La mujer volvió a aparecer lentamente trayendo algo en su mano ¡un teléfono móvil!  El señor Rovira intentó abrir un párpado pero desistió y siguió observando aquello por la ranura de sus ojos.
Ella −la señora Inmaculada− le hablaba señalando el teléfono móvil.
−Lla ma ré al no ves cien tos on ce −entendió que decía.
Él encogió los hombros y una corriente eléctrica volvió a unir todas las partes de su cuerpo, lo cual lamentó, porque ahora le costaría mucho trabajo volver al estado de abandono y alejamiento.
Remotamente escuchó que su mujer repetía a alguien la dirección de su casa, pero él no sería amedrentado así llegara el ejército.  Intentó (¡otra vez esta palabra!) respirar hondo y un asomo de tos lo detuvo, siguió con la respiración corta y continua, y ni siquiera hizo un gesto cuando un hilito de saliva resbaló por la comisura de sus labios.
La señora Inmaculada (ahora me doy cuenta de lo raro de esta frase) fue a sentarse frente a él.
−Lis to, man da rán u na am bu lan cia −escuchó que dijo.
El señor Rovira decidió entonces que era suficiente, que se levantaría del sofá e iría a su habitación, se desvestiría y se acostaría como cualquier otro mortal sobre la faz de la tierra (esta frase se ha repetido millones de veces, pero bueno, no puedo estar escribiendo y corrigiendo) y cuando quiso levantarse ¡nada!  Ciertamente su cuerpo ¡no le respondía! 
Por un momento se afligió, sintió un poquito de miedo pero prontamente la dicha alcanzó su consciencia ¡lo había logrado!  ¡Ahora no tenía cuerpo, sólo consciencia!  Y según su compadre, era el inicio del camino de luz.  Sonrió.
−Sin ver gü en za −dijo la mujer levantando en cámara lenta su puño.
Él quiso hablar y sólo una guturación entre perrito, chimpancé y elefante salió de su garganta.
−Y el com p adre no vuel ve a en trar a quí −amenazó la señor…  su mujer, luego añadió−. ¡Bor ra chos!
El señor Rovira sonrió, o hizo una mueca, y la mujer lo perdonó.  Lo tomó de los brazos, lo jaló con ímpetu y diciéndole hasta de lo que iba a morir se lo llevó trastabillando a la cama.







53 comentarios:

  1. ¡¡¡Vaya melopea que llevaba el marido de la señora Inmaculada!!! (sí que suena rara la frasecita) :)

    un abrazo admirado, artista

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  2. Yo que estaba pensando en alguna enfermedad, jaja y al final resultó una borrachera. Has mantenido la incógnita hasta el final.

    Besos

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  3. que bueno Julio!!!yo que pensé que le había dado un derrame cerebral o algo así y resulta que se había bebido hasta el agua de los floreros!!! A decir verdad ese momento en el que se siente que no se tiene cuerpo y solo se tiene mente no está nada mal, pero claro el compadre no le ha explicado aquí al amigo Rovira, que a la mañana siguiente va a sentir como si le hubiera atropellado una apisonadora y como si la cabeza le pesara 10 toneladas y como si en el estómago tubiera un atajo de ratas mordiendo....hay.....que resaca le espera!!!
    Un abrazo Julio.

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  4. Es para materteeeeeee!!!!!Yo pensaba en un Ictus,en un yooo que sé jaajjajajjaa.Eres genialllll,logras que estemos todos aquí pegados,pendientes del desenlace.Toreroooo,toreroooo,me despido de vos,y hoy,si que es la última vez que escribo con mis ojos de siempre jajajajjajaj.Mañana, uno de mis ojos será nuevo.Glubbbbbb!!!!!!!!!!!!vaya mediñooo!!!!besoss

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  5. La señora Inmaculada con camisón transparente, esto sí que es raro! jajajaja. Muy borracho tenía que estar para obviar tan atractiva visión, esto sólo lo hace uno que no está en condiciones.

    Y qué le pasa a Julio con Díaz-Escamilla? Qué manera de protestar!

    Plas, plas, plas! Por el buen rato que me has hecho pasar.

    Un besito.

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  6. Muchas gracias Julio por entregarnos tan interesante relato. Lo he leído detenidamente y me ha gustado mucho.
    Abrazos. Rosa.

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  7. Julio: No dejas de sorprendernos. Con esa separación de palabras has logrado que la imagen se vuelva sonido pausado en nuestra propia lectura. Y el final, sorprendente!! Felicitaciones!!!!
    Un beso....

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  8. Bueno, bueno, qué cosecha más virtuosa, ¿con qué riegas?
    Estupendo, recibe un abrazo desde el Uruguay

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  9. Estoy comenzando a conocer mejor tu escritura y es tan particular, tan personal, con esos sellos que los artistas ponen en sus obras.
    Me encanta tu estilo, el humor entremezclando autor y texto, me fascinó.

    Un fuerte abrazo y gracias por compartirlo Julio.

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  10. Jajaja, Julio eres genial!!!
    Muy, muy bueno.
    Los borrachos y sus salidas del cuero... Y la paciencia y amor de sus mujeres.

    Besos desde el aire

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  11. El amor confunde, nunca mejor dicho......ingenioso comentario.

    Hasta pronto!
    Isabel

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  12. Yo también pensaba en la enfermedad jaja. Ingeniosa entrada Julio,
    un abrazo !

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  13. Hola, muy interesante relato, la cosecha más virtuosa... interesante, como siempre maestro.
    UN ABRAZO.

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  14. Ja ja ja ...

    Eres increible, maestro.

    Siempre me voy con una sonrisa y eso es sinómino de que tu obra es ingeniosa, divertida, dinámica ...

    Abrazos

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  15. Estimado Don Julio, qué tremenda y encubierta trama, este es un excelente relato que nos ha llevado desde la preocupación de la enfermedad, hasta la explosión de la carcajada por los efectos reales de la emborrachada del señor Rovira.

    Genial, estimado amigo, felicitaciones, solamente los grandes tiene ese facilidad de covertir las letras en expresiones visuales en tercera dimensión y en cámara lenta.

    Me he delitado con su obra Don Julio.

    Con mucho aprecio,

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  16. Que lindo amague que me comí, yo también pensé en la enfermedad.
    Maravilloso Julio, un talento sin limites.

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  17. Me gustó mucho, mucho.
    Eres GRANDE, Julio.
    Un beso o varios.

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  18. Querido Julio, has enfrentado al sopor contra la necesidad del lector de mantenerse despejado para descubrir el desenlace, y lo mejor de todo es que ¡lograste que el aturdimiento del Sr. Rovira fuera el nuestro! Conseguiste nublarnos contagiosamente mientras sentíamos la necesidad de seguir velando por el estado del protagonista, continuar observando e incluso intentando adivinar cual sería la verdadera causa de esta patología que envasaba el entorno en una ranura vaporosa...
    Ha sido genial, Julio, eres un auténtico mago, la nebulosa era tan real, tan vivida por el lector... sin poderse desprender ni un segundo de la misma sensación que invadía al Sr. Rovira. Magistral! Te aplaudo y te vuelvo a aplaudir.
    Sólo he conseguido despejarme, como si un islote apareciera en medio de la niebla, con una frase que me ha parecido buenísima, "Dormir es ensayar la muerte".
    Ha sido un placer embriagador leerte de nuevo.

    Un abrazo inmenso y mi admiración siempre.

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  19. Hola Julio!!Muy bueno amigo!! Me encantó. El relato atrapa, tiene humor y el misterio necesario para querer llegar al final. Me gusta mucho tu forma de escribir.
    Besosssss

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  20. Hola Julio, es un exclente relato, te acercas tanto al lector, que casi pude sentir tu perfume...me encantó la trama, estuve en vilo hasta el final...¡Sorprendente! QDTB, recibe un fuerte abrazo.

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  21. Hola Julio!!
    Se me ha borrado mi comentario,no sé a donde se fue y me da pena...en fin!! me disculpaba por no haber venido en tus anteriores entradas y te decía lo de la falta de tiempo real y material,pero ahora que lo pienso¿de dónde sacas tu el tiempo que nos dedicas a nosotros?,yo entre lo patosa que soy,como prueba es que estoy repitiendo comentario y lo que tardo en escribir,se me va el tiempo y como me gusta leerlo con tranquilidad,pues ahí está,no me da tiempo a llegar a donde quiero,todo esto y además que a veces me quedo sin el portátil,pues para eso se llama así,no?,creo que en el otro te lo decía de otra forma,jaja,da igual Julio,sé que tú lo comprendes y yo sigo intentándolo siempre.

    Me gusta como llevas la historia de los personajes,el equívoco,nos hiciste pensar que no podía dormir,pues la frase de que era un ensayo a ser cadáver,no creo que le ayudara mucho,jaja,para luego sorprendernos con que sencillamente es que estaba borracho.

    Como siempre te aplaudo
    Un abrazo

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  22. Nos engañaste nuevamente. Barajamos todo tipo de posibilidades menos... ¡Una soberana curda! -como diríamos por acá- jajaja
    Me imagino -previo a aquello- las charlas filosóficas entre el Señor Rovira y su compadre... ¡Habrán sido prodigiosas!
    Ma ra vi lloso, Ju li o . . .! !!
    ¡Me encantó! Ingenioso, como siempre. Un fuerte abrazo y ¡Salud!

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  23. Hola Don Julio; nuevamente nos mantiene con la atención amarrada hasta el final del relato, que como siempre muy interesante y divertido.
    Felicidades Don Julio. Sus letras manifiestan la facilidad con que usted maneja la imaginación.

    Hasta pronto.

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  24. Ahora voy entendiendo ese exceso de la bebida por la que sienten tanto amor algunos mortales!
    Aún así...mejor que la muerte venga cuando tenga que hacerlo,sin ensayos ni nada de eso; espontánea como sólo ella es...
    :)
    Besos.

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  25. Julio, usted escribe divino, me encantan sus blogs, me refiero al de poesía también al cual no pude entrar. Este relato me parece muy bueno, pienso que es un maestro en la escritura, saludos

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  26. Conozco varios senores Rovira. :)

    Y senoras de rovira ni te cuento :)

    la universalidad del ser humano. Somos unicos pero iguales.

    gracias x tus visitas y comentarios!

    Petra

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  27. Aquí sintiendo una pena tremenda por el bueno de Rovira y vaya con el hombre, estaba en su limbo particular después de una tajada tremenda jaja.

    Que penita y que dolor lo que hace el alcohol.

    Besitos y sonrisas lúcidas ;-))

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  28. uf ...vaya con el señor Rovira ...yo esperaba que la señora le pedia amor y el lo soñaba pero menuda borrachera tenia el señor como para intentar nada de nada pero borracho nadaaaaaaaaaaaaaa
    bueno Julio tu si que nos pones unos telatos de intriga hasta el final
    un abrazo
    Marina
    ***ESPIGAS DEL ALMA III***

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  29. ¡Vaya tajada la del Rovira! De aquellas que luego te hacen preguntar ¿y eso lo hice yo?... Lo digo por el señor Rovira, mi comentario no tiene nada de autobiográfico, yo celebro el Año Nuevo con un vaso de leche...
    Un abrazo...hip...perdón...

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  30. Buenísimo relato, menudo quiebro das al final,...yo pensando en esa frase de "dormir es morir un poco" y en que se le había escapado de las manos el ansia de salir del cuerpo y ver que se sentía en la antesala de la Dama Negra, y lo que estaba era borracho... al principio, una estrepitosa carcajada ha roto el trance en el que me tenias sumida, pero ahora que lo pienso, ¿nos emborracharemos a veces para esto?...

    Me encanta como escribes...
    Nos leemos

    Be sos len tos pe ro so bri os...;D

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  31. El señor Rovira delirando en las dulces mieles del acohol(El cual desaconsejo en exceso,sobre todo si se ha de conducir), y la señora Rovira hecha una furia contra su compadre..jajaja.
    Una escena habitual,por desgracia, en muchos hogares del mundo, pero tratada con tu pluma se vuelve un episodio divertído y entretenidísimo, en el cual mos hemos visto reflejados en más de una ocasión.

    Me quedo encantada.

    Abrazos desde España.

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  32. MariluzGH: Celebro tu presencia en Hablapalabra, es un orgullo para nosotros que nos leas. Un gran abrazo.

    María: Cuando el sr. Rovira apareció en mi parte consciente también creí que era aquejado por alguna enfermedad, mas, ya ves, todo era producto de una borrachera. Un abrazo.

    METAMORFOSIS: No quiero estar en los zapatos del sr. Rovira, dados los síntomas que dices que produce el exceso de alcohol, porque yo, como nuestro poeta Eduardo, siempre brindo con "leche" (mejor si es de caña). Mil gracias, amiga mía. Un abrazo.

    midala: Estoy seguro que tu operación ya habrá pasado y que estás muy, pero muy bien, por supuesto recuperándote. ¡Evita esfuerzos vanos! ¡Sigue todas, todas, todas las prescripciones médicas y que tu hija te auxilie, por favor! Ya pasará todo. Hoy disfrutaré estos "Torero, torero", por los que me harán falta. Cuídate, por favor. Un gran abrazo.

    ion-laos: Lo mismo pienso, aunque te diré que la señora Inmaculada (otra vez la dicha y rara frase) se veía fea con ese carácter insoportable e intolerante con el pobrecito sr. Rovira. Sobre el conflictillo entre Julio y el autor de turno es ese abusivo uso de frases ya usadas per secula secoulorum del autor que molestan a Julio. En fin, celebro que lo hayas disfrutado. Un abrazo.

    Rosa Mª: Eso es lo importante, poeta amiga, que disfrutes la lectura y tu estancia en Hablapalabra. Un abrazo.

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  33. Oriana Lady Strange: Te lo digo, amiga mía, así escuchaba a la señ... a la mujer del sr. Rovira, pastosa, lenta, tardada en su hablar. Mil gracias por tu lectura, conceptos y comentario (¿no es redundancia, Julio? ¡No, no lo es. Una cosa es la generosidad y otra su apreciación! Y no sostendremos aquí discusiones en un espacio para los amigos. Punto. Se acabó el tema.).

    Omar(enletrasarte): Hasta la República Oriental de Uruguay mando también un fuerte, fuerte, fuerte abrazo de agradecimiento, querido amigo. Y para el riego utilizo optimismo, hermandad y humildad, en el sentido de dejarme llevar por los personajes. Otro abrazo.

    soy beatriz: Gracias, escritora amiga. Siento que por mucha variedad temática, por distinta que sea la mecánica fabular y el corpus narrativo, uno se trasluce en "algo". Gracias mil por ir entendiéndonos. Un gran abrazo.

    Rosa: Todo un universo, amiga mía, todo un caso. Sus delirios, la carga de tolerancia de las mujeres y la materia prima que proveen para que autores como yo escriban estos relatos. Un abrazo.

    BESANA.(Isabel/María): La señora Inmaculada (¡Otra vez!) le decía en la habitación mientras lo desvestía -cosa que preferí no incluir en el relato-. "Una cosa es disfrutar una copita y no que las copitas te disfruten, sinvergüenza. Y ese compadre bla, bla, blablabla.". Gracias, Isabel, por estar. Un abrazo.

    Luis Fernandez Duque: Todos lo creímos, poeta amigo, pero no, como dice nuestra Diana Profilio con su argentinísimo "Curda", todo era una borrachera. Un abrazo.

    Magda: Gracias, mil gracias por dos cosas, uno por tus siempre positivos y entusiastas comentarios, y dos, por los valiosos mensajes de tus publicaciones. Un abrazo.

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  34. Oriana Lady Strange: ¡Disculpa, Oriana! Pero seguimos con cierta polémica "Julio y el autor de este relato". En fin. Que olvidé dejarte mi abrazo, pues te lo repito por tu comprensión. Otro abrazo.

    Jessenia: Esa sonrisa con la que te retiras vale oro, vale el tiempo que demandó la escritura del relato y haber creado Hablapalabra. Mil gracias, amiga mía, mil gracias. Un abrazo.

    CAMPO LITERARIO: He de decir, don Hernán, que si el lector no contribuye con su talento en lo escrito, poco o nada puede hacer un autor como yo. ¡Gracias por nutrir Dormir o no dormir. Un gran abrazo.

    Juan Ojeda: Pifiar a un gran escritor como tú, tiene su mérito (¡déjate de fanfarronadas, por favor! No es fanfarronada, es humildad encubierta por... ¡agh, basta!), amigo mío. Gracias. Un gran abrazo.

    Kayla: Mil gracias, amiga (grande soy yo, el autor de esta entrada, y los autores de las otras entradas, no Julio, él sólo escribe. ¡Basta por favor!) mía, por tu apreciación y cariño (...sí, invítales a café y torta. Ya no voy a contestarte.), realmente es valioso para mí. Un abrazo.

    Gabriela Amorós: Ya sabes poeta querida, de mis experimentaciones escriturales, y ésta ha sido, lo confieso una estupenda oportunidad para penetrar las "casi mismas" sensaciones del protagonista, el que la lectura haya promovido esas sensaciones, vanidad aparte, es un logro. Gracias por el aplauso (¡Esa es una canción, por favor! Y es lo que tengo que decir. ¡Pues usa tus palabras! Bien, bien, bien.), y lo acepto agradecido. Celebro que te detuvieras en la frase (¡No dirás que es tuya! No, no lo diré) "Dormir es ensayar la muerte". Ya ves el ingenio del autor de turno (¡Vaya, al fin me mencionas!) que me proveyó la reflexión. Gracias mil, querida poeta. Gracias. Un abrazo.

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  35. Gabriela Maiorano: Es gratificante que te haya gustado, que estés siempre con nosotros acompañándonos y apoyándonos. Tú mejor que nadie sabe y conoce los avatares de un escritor. Mil gracias, Gabriela. Un abrazo.

    Cinarizina: Si un día, mi poeta nicaragüense faltara en Hablapalabra me preguntaría (¡el aroma era el mío, el del autor, no de Julio! Basta.) ¿qué ha pasado? Te agradezco el inconmesurable (¡qué palabras usas! ¿A quién quieres asombrar? Basta, por favor.) apoyo que me das con tu presencia y lectura (¿Y cómo leería si no está presente? Qué tontería. Por favor, basta ¡ya acabó tu trabajo, ciao!), y sobre todo los valiosos comentarios. Un abrazo.

    estrella: Lamento los problemas técnicos que has tenido, poeta amiga, en serio. Y sobre el tiempo, qué te digo (¡nos usa a nosotros!), me organizo y tengo horarios establecidos (¡sí, el héroe! Basta, por favor.) que los dedico a ustedes (La víctima. No es ser víctima.) con mucho cariño. Gracias por tu aplauso, querida amiga, un abrazo.

    Diana Profilio: No recuerdo en qué tango escuché eso de "esta noche me curdeo...". Pero la sola palabra "curda" (¡Es lunfardo, ignorante! Estoy hablando con Diana, no contigo.) Gracias, artista, amiga, por tanta generosidad ¡Salud y abrazos!

    Chogui: Le agradezco mucho, poeta amigo, poeta salvadoreño; en cuanto le sea posible, por favor, abrace a mis hermanos poetas, hijos de Atlacátl. Otro abrazo para usted.

    Marinel: Mi buena amiga, qué bueno sentirte aquí, con tus apreciaciones, tus inquietudes y solidaridad. Un gran abrazo.

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  36. Sol: Divina es tu presencia, amiga mía, y la de todos nuestros amigos poetas y narradores que dan tanta vida a Hablapalabra (¡nosotros, los autores que te poblamos somos los que le damos...! ¿Te quieres callar un momento, por favor? ¡No me da la gana!) y estimulan mi oficio. Mil gracias. Un abrazo.

    Unmasked (sin caretas): Enteramente de acuerdo contigo, Petra, "somos únicos pero iguales" (¡Yo no soy igual a ti! ¿eso crees? ¡No lo soy!). Te agradezco tus conceptos. Un gran abrazo.

    Simplementeyo: Me encantó tu estribillo: "Que penita y que dolor lo que hace el alcohol.". (¿Por qué no le dices que te aburriste en su fiesta de la playa? ¡Nunca dije eso, mentiroso! Lo pensaste, yo estoy adentro. ¡Cállate!) Te agradezco lo mucho que nos das, querida amiga, no sólo con tus comentarios sino con tus publicaciones. Un abrazo.

    Marina-Emer: Gracias, poeta, por tu lectura, valiosa en verdad. Por estar, por pasar, por entretenerte y darnos tu tiempo con tu comentario. Un gran abrazo.

    Eduardo: Ya lo sabemos poeta, que ni el olor de rones, whiskies o cervezas te gusta ¡hip! Esto se pega. Y también yo, ya lo dije antes, brindo con leche (¡mentiroso, tomas malbec! Voy a ignorarte.) o cafecito. Mil gracias, poeta amigo. Un abrazo.

    Minuet: Esa estrepitosa carcajada ha valido todo el relato, amiga mía (¡que yo te propuse! Sí, está bien, que tú me narraste.). Te dejo un abrazote ¡bien sobrio!

    Maribel Cano: Así es, poeta. Una escena reiterada en todo el mundo, con énfasis en latinoamérica (Con énfasis en tu casa, dirás. ¡Cállate! Qué autor más pesado me tocó con esta entrada.) Gracias mil por venir, acompañarnos y apoyarnos. Un gran abrazo.

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  37. Menuda cogorza tenia el caballero.Y pobre de su mujer,lo que tendría que estar pasando...C'est la vie!
    Saludos Julio.

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  38. Extenso e interessante o texto do senhor que queria dormir, mas com o calor, a gordura, não se decidia a levantar, mas as celebrações são muito pessoais e a mulher como se sentia?
    Sabe dizer-me?
    O texto é muito bom, mas muito extenso para mim,

    Um abraço e fiquei feliz por o encontrar, neste deambular pelos blogs...

    Um abraço forte, (mas eu sou frágil)

    Maria luísa

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  39. Realmente un disfrute esta narración, pude sentir ese desfase entre cuerpo y mente del protagonista, esta cámara lenta tan bien descripta.

    Nuestras felicitaciones por el blog, recién lo encontramos, te seguiremos.

    Buena semana

    J&R

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  40. Te felicito por tus relatos. De cualquier "asunto cotidiano" eres capaz de hacer una obra de arte.

    Mi abrazo

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  41. ¿Dormir ensayar la muerte?...genial Julio..Hay que ver lo bien que te has metido el personaje y la borrachera :)

    UN abrazo

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  42. Cómico, intrigante, filosófico, reflexivo y sobre todo: genial. Gran relato y un final mejor aún.
    Saludos.

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  43. Parece que el señor Rovira bebió un poco más de la cuenta jeje. A las mujeres de los borrachos deberían de hacerles un monumento,lo que tienen que aguantar pobrecitas mías,y los compadres ¡ay,los compadres! se tiran todo el día repitiendo : ¡Vá,vamos a tomar la última! y la última que nunca llega y luego pasa lo que pasa.Le deseo al señor Rovira una pronta recuperación,hay que cobrar fuerzas para la siguiente borrachera jeje.Buen relato una vez más.Un abrazo Julio.

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  44. Hola Julio

    Jjajaajaja, al menos aún estando borracho, recordaba que lo que quería, que ya era bastante. Me ha encantado lo que has escrito, como siempre, lleno de inteligencia y sentido del humor.

    Besotes.

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  45. Mía: Y sí, querida, pobre mujer, lo cierto es que "ese compadre" no volverá a poner un pie en esa casa. Un abrazo y gracias por venir.

    Maria Luisa Adães: Gracias, poeta, por venir. Sobre cómo se sintió la mujer, es una obviedad que está en el relato, y que te resultara extenso, lo siento mucho, cuando hay voluntad de compartir se lee con entusiasmo, yo he tenido que "tragarme" sendos textos en otros sitios y no lo lamento. Es lo que hay, querida. Un gran abrazo, y otra vez ¡gracias!

    Palabras como nubes: Gracias amigos, celebro que encontraran a Hablapalabra, un lugar donde siempre serán bien recibidos, y ustedes se sentirán muy bien con todos y todas las escritoras amigas que, además, son maravillosas personas. Bienvenidos.

    María Socorro Luis: Mil gracias, poeta querida, por tus halagos, conceptos y por tu presencia. Un abrazo.

    Oteaba Auer: Qué gusto recibir un comentario tuyo, querida, es inapreciable. ¿Y Oteaba, ya no supe nada de ella? Un gran abrazo.

    Emanuel Carrizo: Gracias, mi buen amigo, por todo lo que el relato le pareció. ¡Salud!

    Bosón de Higgs: Gracias mil, amigo mío, y buena propuesta. Con las ganancias que nos deje "ratón" en la subasta comenzaremos el dicho monumento. Un gran abrazo.

    Mandalas, Espacio Abierto: Al menos, pese a la borrachera, lo sabía el señor Rovira. Gracias por tu visita y comentario. Un gran abrazo.

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  46. Eres un caso, como nos confundes y ¡vaya, vaya lo que resultó ser! el señor Rovira tenía un poquito de sed.
    Muy bueno Julio.
    Besos.

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  47. Ayyyyyyyy, qué intriga hasta el final. Precioso Julio. Un saludo.

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  48. Huy, tus relatos, Julio, siempre me dejan con una amplia sonrisa en los labios. Éste me parecía originalísimo, pero no me esperaba que lo que el señor Rovira tenía era una borrachera del trece, jejeje. Muy bueno, sí señor.

    Un beso y muy feliz semana, maestro.

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  49. los pucheros de kasioles23 de agosto de 2011, 16:34

    Siempre en tu línea, es decir, alto siempre dejas el listón.
    Para mí,que pertenezco al bando de los principiantes, muchas veces me resulta difícil hacer un comentario al maestro, como suelen llamarte.
    Leo y releo y llegando al final... siempre sorprendes. ¡Bendita borrachera la del Sr. Rovira! Yo ya pensaba en algo mucho peor.
    Saludos.
    kasioles

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  50. O seu carinho é tão contagiante,
    que se eu estiver me sentindo triste,
    suas mensagens sempre conseguem me animar.
    A sua amizade é importante para muitos,
    e principalmente para mim.
    Só o fato de você existir já é motivo de alegria
    Obrigada pela paz que você transmite,
    e pela luz que irradia do seu coração.
    Beijos no seu coração,Evanir...

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  51. Siempre al final de tu relato...nos tomamos la última copa.En este caso resultó ser una borrachera la del señor Rovira.
    Un abrazo al maestro,Julio,un amigo.

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  52. Qué bueno, yo también pensaba en un ictus o algo parecido incluso en un viaje astral y al final...
    esa palabra que lo resuelve todo y provoca la carcajada:¡Bor ra chos!

    Genial, simplemente genial.

    Un fuerte abrazo.

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  53. Pobre mujer! que sufrimiento con un esperpento de hombre así...haciendo experimentos entre el subconsciente que da la borrachera y su imaginación para lanzarse a otros lugares digamos menos terrenales...

    No hay borrachera buena...

    La pobre mujer ya tiene una condena...

    Besitos Julio.

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