domingo, 25 de septiembre de 2011

Moscas

Pocas cosas me molestan en la vida, de hecho soy una mujer tranquila, siempre lo fui. Más cuando murió mi marido, todo se volvió calmado, apacible, reposado.  No soy exigente, aunque tampoco soy conformista, digamos que no hago un infierno por cualquier bobada, ni siquiera la muerte de mi gata me tiró al drama.  He de aclarar, sin embargo, que sí hay algo que me molesta, sólo una cosa me irrita, creo que hasta podría matar a alguien que saliera a defenderlas ¡no las soporto!
Porque las moscas significan suciedad, desorden, indolencia, además son unas pícaras que, aunque se hayan hartado hasta hastiarse y reventar, revuelan revisando revistas ¡me encanta este juego! ¡Yo ya llegué, yupi! ¡Tú te tardas, tonta, tanto tiempo tratando tibiezas! ¡Con eme!
A ver, no esa tontería de “mi mamá me mima mucho”, sino, a ver: Mañana morderé mosaicos mojados, mojigatos, metidos muy mal, mentirosa.  Bueno, por ahí es el juego.
¡Ya te voy a dar de comer, cochina!
Dicen que las moscas tienen un asqueroso instinto, no, no era eso, ¡ah, sí! Tienen ojos con miles de cositas sensibles a la luz, o sea, que miran en todas, todas direcciones, y que por eso es tan difícil atraparlas, pero ésta resultó más viva que los demás.  Cuando sentí ya me tenía casi aplastada en su manota, y la agitaba como loca riendo, ¡y a nosotras nos llaman salvajes!  Reía y reía y tosía y decía muchas cosas.  Estaba rabiosa, hasta que me tiró aquí. Yo sólo la miro con sus gigantes ojos, sólo tiene dos, pero son bestiales, tiemblo de sólo imaginarme triturada en sus fauces, realmente es monstruosa.  Cuando se asoma y abre un poco allá arriba para tirarme algo de comida ni siquiera me atrevo a saltar, volar y escapar, si vuelve a atraparme ¡me mata! Porque es mala, realmente ni siquiera quiere comer, ¡sólo fastidiar!  Por eso la tengo allí, en ese frasco de vidrio, le abrí a la tapa unos agujeros para que no se asfixie la cochina, abro un poco y le tiro cualquier cosa ¡de comida estoy hablando! Va a morirse entre sus propios excrementos, porque esos puntitos negros en las paredes del frasco son eso ¡excrementos de la cochina! También la tengo allí para verla morir.  Es mi homenaje a la humanidad, de esa forma rindo tributo a  los que odian a las moscas.  Aunque es extraño, dicen que viven diez o quince días, y esta sucia ¡a ver! Casi un año lleva la tonta revoloteando en su frasco de vidrio ¡un año! Es mucho tiempo, lo sé, pero lo más extraño es que no me siento cansada, recuerdo a otras, envejeciendo, perdiendo fuerza y simplemente muriendo. ¡Pero yo me siento más fuerte!  Todos los días más fuerte.  Me he resignado a estar aquí, en tanto ese monstruo me de comida, me conformo con ver siempre lo mismo, subo por las paredes, camino sobre el techo que tiene pequeños agujeros y me lanzo ¡sin volar! Y un poco antes de caer agito las alas.  Es poca diversión, pero es lo que tengo ¡nunca seré vieja! Aunque esté cansada, aunque mi único regocijo sea sólo observar cómo va muriendo esa cochina.  La vez pasada me puse a imitarla, pero ya no lo hago porque la tonta también me imita, creo. Me puse a observarla detenidamente, con una lupa, y la cochina le echa algo a la comida, saliva o algo, como que eso ablanda lo que le doy, y luego se la va tragando.  Bueno, me quité la prótesis de la boca y a un pan ¡mejor no les cuento!  Les dará asco, pero ¿saben qué? Fue lindo, me gustó, aunque sé que no es normal, digo, eso de acostarme sobre mis alas, con las patas hacia arriba, pero cuando la vi que se echó y cerró los grandotes ojos ¡la imité! Y me pareció, extraño al principio, pero, ya me acostumbre.  El monstruo no se da cuenta que ahora duermo así, así como él, sobre mis alas, mis poderosas alas, grandes y fuertes, como los ángeles, que yo no sé si sea cierto, pero si existen ¡deben tenerlas! La vez pasada que me acosté en este sillón ¡así! Me quedé viendo el techo, recordé a mi marido que me dijo una vez ¿por qué roncas en el sillón y en la cama no?  No supe qué contestarle, hay una grieta en el techo, hace dos años que no se repara, las grietas me dan mucho, mucho sueño.  No importa, no tengo nada que hacer, duermo a cualquier hora, cuando me da la gana, no creo que esa cochina se muera si no le doy de comer en un rato, porque estoy cansada ¡cansada de hacer nada! Cansada de esta vida tonta y de sólo tener a esa marrana en el frasco ¡mi única distracción!  ¡Es mi prisionera! También dormir me encanta.  Dije que había una grieta en el techo, pero son varios hoyos ¡sí, son agujeros! Y yo los hice para que… ¿la mosca no se asfixiara? ¡Dios mío! Yo estoy allá acostada ¿dormida? ¿Muerta? ¿Qué hago aquí en este frasco? Mujer mayor muerta mientras mosca macabra, majadera, mira mi meada ¿Qué diablos ha pasado?

48 comentarios:

  1. Esto es un relato increible. Tienes que estar muy atento para separar las vidas de la mosca y la vieja que no deja de ser prisionera a su vez incluídas hasta las aberturas del techo. Todo se relaciona en estas vidas. Cuando te crees que eres el rey te das cuenta de que solo eres un prisionero de la corona. La leche que paradojas. Un abrazo Julio.

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  2. Julio, que manera de atraparnos y necesitar casi los cinco sentidos en tu relato. Paso de sentirme la mosca a sentirme víctima de mi misma.
    Tienes una mente privilegiada.
    Besos.

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  3. Ufff, Julio. No me gustan las moscas, pero vamos, que ni se me ocurre meter una en un frasco por si acaso me pasa como a tu protagonista y me encuentro atrapada como la mosca. Me ha encantado ver un tautograma enredado en la historia.

    Besos desde el aire

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  4. Madre mia que relato más necesitado de mata-moscas o que la vieja se rocie de colonia y saque de una vez a la mosca del frasco y la lleve lejos donde esté una vaca y plaf que se harte de comida la mosca y no se acuerde más de ella...que mosca ...que vieja y que frasco mas servicial para ditraer sin necesidad de tele...
    Julio eres unico chico que manera de distraernos sin frasco.
    un beso
    Marina

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  5. Éste es un relato relativo(y perdón por la redundancia), en el que se demuestra que la vida depende... según el vidrio tras el que se mire.

    Otra lección magistral de cómo la técnica literaria no tiene secretos para ti. Excelente!

    Un abrazo, todavía no sé si desde dentro o desde fuera del frasco.

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  6. Vaya quien es quien?Son dos en una o una en dos? Pensar que en vez de yo misma puedo ser una mosca...agggggg algo de asquito meda, pero lo de ser una mosca y convertirme en persona es otra cosa. A cuantas moscas has observado antes de que tu mente maquinara este entresijo?.
    Jaja es genial.

    Besitos y sonrisas antimoscas :-)

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  7. hola julio pero que arte me he enfrascao con la mosca y mira que no las soporto y hay via sentaita en un sillon era un sueño o es ficcion ? que imaginacion pa crear jajaja mira me has sacao una risa que hace dias que no me rio te dejo mi nueva dire por si quieres estar tuve que cerrar mi blog por problemas que tuve con el feliz dia besitossssss
    http://embrujodelsur-embrujo.blogspot.com/

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  8. Interesante relato. Dos vidas, humana y animal? insecto-humano? persona-mosca?
    Cuanto hace el aburrimiento...
    A mi me da que ambos personajes relatan sus vivencias desde uno y otro lado del cristal, pero me da que sus conciencias hablan demasiado... y esta señora terminó enloqueciendo y construyendo una vida alrededor de la mosca... o de su propia imaginación... si es que no hay peor cosa que la soledad inducida, que te atrapa en la espiral del delirio...

    Me gustó mucho los saltos de personajes, si es que a la mosca la podemos llamar personaje... o tal vez solo era el subconsciente de la señora...hablando sola y por boca del insecto..

    Besitos Julio.

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  9. Wauu..! ¡qué relato tan extraño..!¡me gusta...me hace pensar..!
    La mosca se convirtió en la vieja..ó la vieja en la mosca...ó ambas sufrieron una simbiosis..¡ó yo me estoy volviendo majara..jajajaja!
    Lo cierto es que, con estos ojos "gigantes",revoloteé por todo el relato..,y de vez en cuando me posé a descansar ,en la naríz del autor, que estaba immerso en la taréa de escribir el siguiente episódio.., y le molesté un poquito..pzzz..pzzz..jajaja!..¡casi me aplasta con el periódico de la mañana..!jejeje

    Genial,Julio,...¡Pobres vieja y mosca..!
    Triste destíno cruél..,que juega a entretener viejitas solitarias,con un frasco en el que una mosca cojonera, acaba sus días pensando que es una vieja cascarrabias,y una vieja pensando que acaba muerta en un frasco de moscas cojoneras...

    Se me pasó el tiempo volando...de renglón en renglón,cual mosca cojonera al fín.

    Delíz fía jon Dulio..,ge mustó ru selato.

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  10. PD:
    Deberías escribir un relato(pero corto)al vésre.

    ¡¿Te atreverías...?!jajajaja
    Sería genial

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  11. Metamorfósis invertidas en toda regla lograste a través de estas vieja/mosca que se observan entre sí a través de diferentes prismas, pasando de la fascinación, el asco, hasta la angustia y la asfixia vital de una y otra.
    No sé cual de las dos me produjo más conmiseración. Además de la soledad, por el sadismo...
    Un abrazo, Julio.

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  12. los pucheros de kasioles26 de septiembre de 2011, 3:44

    Hola, Julio, buenos días: Ya veo que escribes a una velocidad... Tardo yo más en hacer la comida.
    Quería comentarte que la soledad, la apatía y la frustración, pueden adueñarse de nuestra vida, al perder lo que teníamos.
    Esto puede ser el caso de la protagonista, que, al faltar su marido, cae en esa triste soledad que la lleva a hacer, de esa pobre mosca, su chivo expiatorio.
    Trata de torturarla, encerrándola en ese frasco, y no se da cuenta que ella está presa también en esa otra celda que lleva el nombre de soledad, de desgana por vivir y que desemboca en ...¿quizás locura?
    Gracias, siempre nos mantienes atentos y entretenidos con tus relatos.
    Abrazos.
    Kasioles

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  13. Genial, eres todo un genio!!!Nos hablas de unaaaaa mosca y eres capaz de hacer un relato jajajjajajajajja.Fabuloso,la buena de la mujer centro su vida en la mosca y...se volvió loca?o ya estaba loca?Lo que puede hacer el "vender horas"...dios mio que miedo.Mi torero preferido....ole y ole y oleeeee.mILLLL BESOSSSS

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  14. Decía Oscar Wilde—bueno, no sé si lo decía pero cómo todas las grandes citas se le atribuyen a él—Decía, digo...Me perdí...
    Empiezo de nuevo, "Todos los seres de la creación tienen su cometido menos las moscas" Dicen que dijo Wilde.
    Tú querido Julio nos demuestras con tu brillante relato que todo es cuestión de ver las cosas desde el punto de vista del otro...Aunque a veces resulte peligroso.
    Maravilloso juego de espejos y palabras, sorprendiendo al lector una vez más...
    Perdón me he vuelto a perder...Es que tengo una mosca revoloteando a mi alrededor...

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  15. Julio, "Retratos de una obsesión" Magistral!!!!!

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  16. A fin de cuentas todos somos prisoneros de algo, o/y de nosotros mismos.
    Siempe está bien ver la historia desde dos puntos de vista distintos, aunque se parezcan tanto y puedan llevar a confundirse.
    Me ha gustado, Julio.

    Confieso que no es la primera vez que te leo, otras hubo en que seguí tus comentarios desde el laberinto de Ana.
    Me harán compañía tus palabras

    Saludos, Julio, un placer venir a leer

    Ío

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  17. Julio, es un relato increíble, que me ha tenido atrapada mientras lo leía, me parece fascinante aunque me has dejado pensativa.
    un abrazo

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  18. a mi con las moscas me pasa algo similar y las ahuyento orando.

    Sobrecojedor texto amigo Julio. Para colocarlo en el frontispicio de mi capilla. Para reafirmar el velo místico que une lo divino y lo mundano. Oremos por la poesía que posee el don de la bondad y el bálsamo del amor.
    Mi condicón santanderina no exime mi rendición pascual bajo los pies de Messi. Pronto acudiré a las calles con mi vehículo lunar y espaciré las cenizas del viejo mundo. Cantemos orando y oremos cantando:

    ¡¡¡ Visca el Barça
    y fuera el canibalismo pecador !!!

    FRAY BERENGARIO / PREMIÀ DE MAR / BARCELONA

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  19. Un texto realmente estremecedor, en sus letras se va mezclando las figuras del prisionero y el carcelero de una manera genial; además el simbolismo de las moscas como sensación de cansancio, calor, muerte, cruento paso del tiempo, etc.
    Es una narración maravillosa, no puedo dejar de sentir que está hablando de la depresión, y para mi habla de la depresión. Quizás, esa sea la prueba irrefutable de lo que este texto me ha impactado, porque ya lo hice mío...

    Abrazo gigante amigo Julio, gracias por enseñarme.

    Posdata: le quería comentar que estos días estuve visitando un blog absolutamente genial, es de una chica que escribe poemas, he quedado tan impresionado con su talento que quisiera compartirlo con usted amigo, el link es http://deamoryotrosdelirios.blogspot.com/... cuando tenga tiempo visítelo, no se va a arrepentir, aprovecho a mandarle otro Abrazo, nos vemos.

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  20. Hola Julio!! muy buen relato. El desmembramiento de persona e insecto hace que el texto sea muy interesante porque no se sabe como terminará y en que envoltura. Lograste un final excelente, ambas en un mismo cuerpo, pensamiento y sensación.
    Un abrazo

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  21. Mira, Julio, no me ves, pero acabo de ponerme de pie encima de la silla y hacerte la ola yo aquí solita....es que eres una máquina!!!! esto si hay que leerlo poniendo todos los sentidos...a final creas una espiral de desesperación que me he pasado un buen rato sin querer mirar hacia arriba,me daba miedo..... porque no quería ver ni agujeros ni grietas....

    Si es que hay veces que nuestros comportamientos no son tan distintos de los de los animales...
    Que bueno eres Julio!!! Un abrazo.

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  22. Que interesante Tocayo, entrelazar la vida de una mosca y la vieja es sumamente genial, muy buen relato amigo, gracias por compartirlo, desde Guatemala SL

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  23. Todo depende de la perspectiva de cada cual, pero vamos, que la mosca me mire con esos ocelos...puagggggg!!!!

    Le diré a Clochard, que las moscas si tienen cometido, vamos, que es algo que decimos mucho por las Españas: ¡vaya mosca cojonera!

    Un besito y me voy echando leches por si acaso!

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  24. que relato mas genial...eres un buen escritor..

    un fuerte abrazo

    fus

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  25. Julio, me recuerda tu cuento a Franz Kafka y el personaje que se siente escarabajo Gregorio Samsa, en "La Metamorfosis". El que encuentra sobre su cama un montruoso insecto... y es él finalmente.

    Muy interesante, y para los golosos que arremeten contra las moscas, hay que pensar antes de atrapar o matar alguna, no vaya siendo álguien conocido...

    Mi cariño y admiración por tu talento indiscutible, el que disfrutamos los que hemos encontrado este Blog lleno de intereantes cuentos.

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  26. Kafka aplaudiría tu relato, Julio, y te buscaría para hacerse una foto contigo, seguro.

    Apuesto todas las moscas que hay en mi casa a que la señora se quedó un poco mosca porque la mosca era muy señorona.
    O tal vez es que a la señora le entró la mosca por el aburrimiento de ver a su presa día tras día en un frasco, y la mosca, cansada de ver a la mujer mayor presa de una obsesión tras un frasco, se posó en todas la EMES de : mañana morderé mosaicos...


    Besos, me encantan tus relatos. Eres un crak!!!

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  27. Wow! la mosca atrapada por la vieja que se queda atrapada por una mosca!! aburrimiento? no. Yo diría Olvido. Una anciana olvidada por todos. Una mujer sin objetivos ni vida. ES la existencia en un no dejar vivir ni vivir...y morir en el intento. O lo que es peor, terminar loca de atar!

    La soledad, querido amigo, cuando nos atrapa con sus garras, no nos deja ver la realidad.

    Tu relato, como es costumbre, de una imaginación sin límites y un desarrollo absorbente.

    Un abrazo

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  28. Cuando el cazador es cazado..o casado (por el aburrimiento)..da lo mismo...Aqui una mosca increible y una señora normalita...ambos enfrascadas en una lucha..la de todos los dias
    Saludos desde el sur

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  29. Zas! Y la lectura atrapó al lector ¿grietas? ¿esperanza? aletea hasta tu metamorfosis.
    I N C R E I B L E

    Una vez leí un fragmento "la mosca y el mercado" (o algo así, no lo recuerdo bien) de Franz Kafka, y vuestra "lupa" hacia la lectura es sagaz e implacable. Un fuerte abrazo amigo

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  30. Hola Julio...un relato en que tuve que poner mis seis sentidos y usar todos los ojos de la mosca...muy interesante...hay que ponerse en los zapatos ajenos, al final no somos la maravilla...ha sido un verdadero ejercicio mental el leerte...eres genial...Recibe un fuerte abrazo.

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  31. ¡GRANDE, Juliooooooo! Debería pararme y aplaudirte hasta el cansancio... pero temo que, al aplaudir, justo se cruce una mosca y quede estampada entre mis palmas. ¿Y si luego se reaviva, qué hago? A ver si termino como la "doña" sin saber ¡¿Qué diablos ha pasado?!

    Brillante manejo de su pluma, Sr. Escritor... Un fuerte abrazo.

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  32. Al principio me sentì perdida en este relato..pero despues de leerlo màs de una vez..empece a entender...mmm..se dice que si hubiese solo 3 mujeres en el mundo, se juntarian dos para hablar de la tercera, y pues aquì no hizo falta un tercer personaje para hablar uno del otro.jajaa...me encantò.

    Excelentemente bien escrito
    Besos mi querido Escritor.

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  33. Confieso que me repugnan las moscas, pero el relato es extraordinario. Protagonista y mosca, al final no se sabe quién es quién. Y realmente no sabemos mucho cuando la realidad se torna una locura.

    Te felicito, Julio
    Aplausos
    Y un abrazo
    Ana

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  34. Impresionante!!
    Es que el final distorcionó todo cuanto desenlace imaginaba...
    sos un grande de los cuentos breves!!
    un abrazo

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  35. Julio, li-te e reli-te, pouco a pouco a história foi-se revelando. Que relatos magnificos!!!

    um forte abraço amigo
    oa.s

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  36. Recordé una película, y recordé también que aborrezco las moscas -insecto más repugnante no existe-, así que para leerte, tuve que dejar de lado mis sentimientos personales.
    Una vez más brillante, ingenioso, talentoso. El final como corresponde a un buen relato, inimaginado.
    Un abrazo Julio.

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  37. Karras: También este autor tuvo que tener todos los sentidos despabilados, querido amigo, para llevar con bien la historia. Ya ves los problemas en los que nos meten algunos personajes y su forma de narrar. Un gran abrazo.

    Rosi: Gracias por tus conceptos, poeta. Es halagador, para qué negarlo, que te manifiestes con tanta hermandad y cariño. Mil gracias. Un abrazo.

    Rosa: Sí, querida, esta protagonista programaba pronunciaciones propensas ¡a su diversión! Incluyendo la mosca, por supuesto. Un gran abrazo desde el aire.

    Marina-Emer: Me ha sorprendido la cantidad de soluciones que has formulado para esta señora que ¡goza con la mosca! O quizá, y de repente, en otro relato haga lo que tú aconsejas. Gracias por tu lectura, poeta. Un abrazo.

    Mercedes: ¡Desde fuera del frasco! ¿Te imaginas ser abrazada por una mosca? Creo que no estoy preparado para dicho encuentro. Un gran abrazo ¡fuera del frasco! Y gracias por estar siempre.

    Simplementetú: Pensé en sacar mi licenciatura en Moscalogía pero me dejaron con todas mis notas con un “no, muchas gracias”, así que mejor me dediqué a escribir. Gracias por tus besitos y sonrisas antimoscas ¡y por estar!

    Embrujo: Aplaudo que sonrieras porque de eso se trata esto, aunque no todos los relatos o cuentos sean para reír, hemos de disfrutar tanto la escritura como la lectura. Ya estuve en tu nuevo espacio, amiga mía, y he dejado como testigo de ello, un comentario. Abrazos.

    Gala: Muy interesante tu análisis, Rebeca, no había pensado en la posibilidad que la mosca en sí, sea la consciencia de la señora (o al revés). Da mucha luz tu comentario, amiga mía, porque ya lo sabes, yo sólo soy el autor. Mil gracias y un abrazo.

    Maribel Cano: ¡Así que tú eras! Y esto, señora mía, no es el periódico de la mañana, es de la semana anterior, que no echaría a perder el de hoy tras una mosca. Gracias por tu comentario, y un día de estos me decido por escribir un relato o cuento lon cas paracterísticas cedidas, va yeré qué ocurre. De momento te agradezco grandemente tu valiosísimo apoyo y cariño. Pambién Tara ti un delíz fía, Moña Daribel. Granzos abrades.

    La Zarzamora: Todos los condimentos con que has resuelto tu lectura ¡me encantan! Mil gracias por tu presencia, y sobre todo, dejarnos tu parecer. Un abrazo.

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  38. Los pucheros de Kasioles: Si de algo presume Hablapalabra y este autor es de la calidad de amigos y amigas que nos acompañan. En pocos espacios encuentro la calidad de comentarios que ustedes, gentilmente, me brindan; esto, además de acariciar mi sensibilidad me compromete (dichosamente) a no defraudarles. Agradezco tu análisis y propuesta post-escritura. Valiosísimo. Un abrazo.

    Midala: ¿¡Qué hice!? … ¡Ah! No había visto mi “Torero”. Gracias, querida amiga. Como dice nuestra escritora Diana Profilio tú ya acuñaste el “torero” y cuando no lo miro surge aquella pregunta “¿qué hice?”. Mil gracias. Un abrazo.

    Clochard: ¡Divertido e ingenioso! Inteligente, intensamente intencional ininterrumpido. Así es tu comentario, amigo mío, y ¡cuidado! No mates esa mosca que puede ser algún “anónimo” que siempre anda husmeando ¡hay tantos! Si puedes “atrápalo y mételo en un frasco”. Un abrazo, Javi. Un abrazo.

    María Cristina: ¡Me encanta tu: “Retratos de una obsesión”! Qué forma tan bella de resumir “Moscas”. Felicitaciones. Un abrazo.

    Ío: El relato es un riesgo a la comprensión −como bien señalas− lectora, mas leyendo los valiosos comentarios considero que se cumplió el cometido. El laberinto de lluvia de la escritora Ana Muela Sopeña, el tuyo y el de todos estos amigos, son paradas entusiastas que hago en mi tournée literario. Gracias por acompañarnos. Un abrazo.

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  39. CUATRO ESPECIAS Por ELENA ZULUETA DE MADARIAGA: Todo vale en el “mundillo de la lectura”, apreciada Elena, el disfrute, la reflexión, el rechazo, la alegría, tristeza y cualquier emoción, toda vez ocurra algo, el cometido ha sido cumplido. Celebro que tus valiosos asuntos –que a todos nos conciernen− de salud, vayan por buen camino. Hablapalabra, este autor y todos mis amigos y amigas te enviamos (ya lo sabes) la más positiva, intensa y hermanada vibración. Un abrazo.

    FRAY BERENGARIO: ¡Qué enorme gusto que deje su capilla y venga a Hablapalabra! Sabe que no sólo la Penyabogarde le aprecia, aquí está en su casa y seguro que ya veremos su vehículo lunar y batacudo animando a los seguidores barcelonistas. Un gran abrazo.

    Juan Ojeda: Es lo que he dicho, si tengo para presumir de la ENORME CALIDAD de mis amigos y amigas. Qué estupendos comentarios, reflexiones, análisis, compresiones (y comprensiones), ¡qué autor no les querría a ustedes como lectores! Gracias, escritor amigo, muchas gracias. Y ya estuve por deamoryotrosdelirios, amigo mío, y tienes muchísima razón, es un espacio espectacular que, por este medio, recomiendo a mis demás compañeros de letras. Abrazos, Juan; abrazos señor Ojeda, y cuando vean a Juan Ojeda abrácenlo de mi parte.

    Gabriela Maiorano: Lo dije antes, poeta amiga, la escritura de este cuento fue un riesgo por los sorpresivos cambios en la fuente discursiva (quién habla), valió la pena. Mil gracias por tu comentario ¡qué comentarios, señores y señoras! ¡Qué comentarios! Me muelen de orgullo y satisfacción −por su compañía, aclaro−. Un fuerte abrazo.

    METAMORFOSIS: ¡Sí te he visto! Y como soy envidioso, también me he puesto de pie para aplaudirles a ustedes y hacer una OLA entusiasta por su compañía y palabras. “Una espiral de desesperación”, qué fantástica frase. Mil gracias. Un abrazo. O mil abrazos y un gracias.

    STARLIGHT: Gracias, Julio (hay eco aquí), por venir, por leernos, por tus saludos desde la bella Guatemala. Les deseo buena suerte en la segunda vuelta electoral. Guatemala, sus niños, jóvenes, todos merecen al fin un buen presidente, oj−alá sin el collarcito que Washington y el Pentágono les pone a todos. Un abrazo.

    Ion-Laos: ¡Créeme, hay una mosca en una esquina del monitor! Nuestro buen amigo Clochard, ya ha leído tu mensaje ¡y yo también! ¡Y la mosca! ¡Y todos! Mil gracias por tu compañía, solidaridad y ¡tanto cariño! Un abrazo.

    Fus: Muchísimas gracias por tu concepto. Es inapreciable tanto hermanado cariño. Un abrazo fuerte.
    Leticia

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  40. Las obsesiones pueden llegar a límites insospechados,este gran relato de una pobre mujer -creo que con demencia senil o dicho vulgarmente como una puta cabra- que vence al aburrimiento atrapando una mosca y metiéndola en un frasco para observarla,esperando su muerte que nunca llega.Bueno,y la mosca también se las trae,imitando a su captora,increíble jeje como increíble la extrapolación de ambos seres.No hagas nunca nada que no te gustaría que te hicieran a tí,simplemente.Un abrazo Julio.

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  41. LETICIA: Mi percepción −como escritor− es que las más de las veces “reciclamos” lo leído, lo visto, lo deseado, lo soñado, lo escuchado, lo olido, lo sentido, como en los sueños: Soñamos todo aquello que hemos experimentado; y toda vez sea involuntario ¡bienvenido sea lo escrito! Resumo que un escritor no ha de apelar a su memoria orgánica sino a la memoria de las emociones (Este postulado mío, lo plagió un pobre diablo que lo presume en su blog). Mil gracias por tu valioso comentario, por recordar al grande Kafka y por estar cerca de nosotros. Un gran abrazo.

    Merche Marín: ¡Sería un gran honor una fotografía con Kafka y otra con Cortázar, y Juan Rulfo, y Merche Marín, claro que sí! Son estupendos vuestros comentarios, vuestros análisis, son estupendos. Me encanta tanta inteligencia puesta en ellos. Un gran abrazo, poeta.

    Mascab: Sintetizado espectacularmente: La mosca atrapada por la vieja que se queda atrapada por una mosca. ¡Bárbaro! Y estoy contento porque sentía que el cambio discursivo podría o no entenderse, ahora sé que funcionó. Mil gracias, amiga mía, un gran abrazo.

    Prudencio Hernández Jr.: Efectivamente, amigo mío, ambos personajes, ambos protagonistas enfrascados en una lucha sin cuartel. Un gran abrazo hasta ese Sur admirado.

    J.Maseda: Mi querido poeta ¡ya pronto en toda España estará a la venta ¡ÁNIMA CODA! La primer creatura, la primera publicación de este extraordinario escritor, así que si lo ven en una estantería ¡cómprenlo! Porque se agotarán. Me ha dado, el poeta Maseda, el honor de escribir su Prólogo. Salidos de la Publicidad, amigo mío, te agradezco tanto que nos das en Hablapalabra. Un gran abrazo.

    Cinarizina: Tú y los demás compañeros y compañeras son geniales, poeta amiga, genialísimos −si me permiten la palabra−, por tanto que aportan a Hablapalabra y su desarrollo, y, he de reconocerlo, la tanta alegría que dan a este autor. Un abrazo.

    Diana Profilio: Saberte aquí, sentirte aquí, escritora, poeta y pintora, es un honor grande. Lo dicho, estoy rodeado de estupendos escritores y magníficas personas. Y, por favor, no aplaudas ¿o sí? Tengo la sensación de que un “anónimo” anda rondando con su disfraz favorito ¡de mosca! Mil gracias por tanto. Un abrazo.

    Diazul: ¿Así que se juntarían dos para hablar de una tercera? ¡No te lo puedo creer! Celebro que disfrutaras el cuentico, amiga mía. Gracias y un abrazo.

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  42. Toro Salvaje: Gracias por venir, Toro, ¡y qué tremendo halago! Dudo que superemos a nuestro maravilloso Kafka. Un abrazo.

    Ana Muela Sopeña: Hay cuentos extraños. Hago la aclaración que: Un relato, es una fábula, una historia que puede ocurrir en la vida real, y un cuento, es una historia que no ocurrirá jamás en la vida real. Bien. Decía que este cuento es extraño, como aclaré antes por la fuente discursiva, principalmente. Mil gracias por tu lectura, poeta. Un gran abrazo.

    Omar(enletrasarte): ¡Celebro que estés de vuelta, poeta amigo! Aunque no podamos entrar en tu blog, y lo sé porque muchos me envían mensajes preguntando cómo entrar en él, contesto que ni yo, tu amigo, he podido hacerlo. Mil gracias por tus conceptos. Un abrazo.

    OceanoAzul.Sonhos: Es maravilloso que nos visites, que nos leas y disfrutes de Hablapalabra, fina poeta, es estupendo que siempre nos acompañes. Un gran abrazo.


    Taty Cascada: Aprecio que hayas dejado a un lado esa aversión a las moscas y nos leas, querida poeta. Mil gracias por venir y dejarnos tu valioso comentario. Un abrazo.

    Bosón de Higgs: El cierre de tu valioso comentario, amigo mío, vale la pena extraerlo y repetirlo y repetirlo: No hagas nunca nada que no te gustaría que te hicieran a ti. Gracias por tu tiempo, tu hermanado cariño y acompañarnos en Hablapalabra. Un abrazo.

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  43. Dos monologos en un DIALOGO, no dejas de sorprenderme. Un abrazo

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  44. Lapislazuli: Lo dije, querida poeta, es un texto extraño. Agradezco sobremanera que llegues, que nos leas y dejes tus impresiones. Un abrazo.

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  45. Julio me recordaste a una mosca gigante en una pantalla de cine, en mi adolescencia y sí que tenía unos ojazos impresionantes y redondos y las patas peludasssss, qué monstruo.....jajajaa
    me la figuro así metida en una botella grandísima....ufffffff qué miedo....
    Muy bueno tu post, gracias por dejarlo.
    Saludos afectuosos
    Leonor

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  46. Me quito el sombreo ante ti, queridísimo Julio, que sabes crear relatos increíbles con la sencillez que solo tienen los más grandes.

    La vida de la mosca y la de la mujer en un extraño paralelismo y dependencia mutua...
    Genial otra vez.
    De premio.

    Un abrazo enorme.

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  47. Sucede que la mayor parte del tiempo resulta muy difícil no acabar en el frasco. Lo más triste es que casi siempre somos nosotros mismos los que, de una forma u otra, nos metemos en él. El autor (el artista en general) es siempre excepcional observador.

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Ahora te toca hablapalabrar